Antes de cualquier cosa debes tener claro qué es la corrosión y por qué se produce. La corrosión es un desgaste en el metal y es considerado un fenómeno electroquímico que se produce por un flujo masivo generado por las diferencias químicas entre dos o más piezas. Algunos factores determinantes para su aparición son: la presencia de soluciones ácidas y de sales disueltas, así como una alta concentración de oxígeno o una temperatura elevada.
Dicha alteración puede causar daños irreversibles, por lo que prevenirla es fundamental, en la mayoría de los casos cuando se presenta el fenómeno de la corrosión es demasiado tarde para actuar porque ya se ha derivado una destrucción parcial o total en el metal, por eso es importante identificarlo inicialmente para lograr mitigar daños severos.
La corrosión se puede presentar en edificaciones, automóviles, maquinaria industrial, embarcaciones, puentes, etc, por lo que en estos escenarios es donde se debe tener mayor cuidado.
Tipos de corrosión más comunes
Se debe tener en cuenta que muchos de los tipos de corrosión están determinados por las condiciones del entorno o de las características propias del material. Sin embargo, la clasificación más frecuente es la siguiente:
1. Corrosión generalizada: también es conocida como corrosión uniforme. Es la más perjudicial porque se produce de forma homogénea sobre toda la superficie del metal, lo que provoca un deterioro casi total del material. También es la más fácil de prevenir. Es más frecuente en el área de la construcción.
2. Corrosión localizada: es menos fácil de detectar porque se presenta en puntos específicos del material según las condiciones del entorno e incluso de la geometría de la pieza.
3. Corrosión galvánica: aparece cuando hay una transferencia eléctrica de partículas entre un material y otro. Cuando dos o más tipos de metales entran en contacto en presencia de un electrolito, se forma una celda galvánica debido a que lo metales cuentan con diferentes potenciales de reducción.
4. Corrosión en grietas: es la tendencia de acumulación de corrosión en las grietas o hendiduras del metal. Es el deterioro de partes de una superficie metálica a diferentes velocidades, debido a que las partes de la superficie entran en contacto con diferentes concentraciones del mismo electrolito. En otras palabras, el deterioro en un punto es más rápida que en el otro punto.
5. Corrosión por tensión dinámica: también conocida como celdas de esfuerzo, excepto que las tensiones son cíclicas. La carga y descarga repetida generalmente causa una aceleración en el proceso de corrosión. Las tensiones pueden ser el resultado de las cargas de agrietamiento debidas a la concentración de tensiones, o pueden estar provocadas por el tipo de tensiones residuales o de montaje desde la fabricación. Las tensiones residuales se pueden reducir mediante templado.
6. Corrosión atmosférica: Es el efecto de los agentes corrosivos presentes en la atmósfera, tales como: el oxígeno, el dióxido de carbono, el vapor de agua y compuestos de azufre y cloro. La gravedad de este tipo de corrosión está directamente relacionada con la cantidad de vapor de agua, compuestos de azufre y cloro presentes en el aire.
Como se había mencionado antes, se debe procurar prevenir la corrosión, y de ser imposible, se debe combatir a tiempo con productos adecuados. En Grupo Suquimsa puedes encontrar Rust Boster, es un moderno compuesto químico en el que una
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